Glee: canturreos cargantes y un gran sentido del humor
He visto Glee. Entera. Bueno, lo que existe.
Os voy a intentar explicar por qué todo el mundo la odia y los que la ven parece que lo hacen como tratando de que no se note mucho que les gustan estas cosas.
Para el que no sepa ni de qué estoy hablando, Glee es una serie ambientada en un instituto de Ohio que cuenta las peripecias del conjunto de adolescentes inadaptados que integran el Glee Club, un grupo extraescolar en el que los chavales canturrean temas de moda bajo el cuidado de su repelentísimo profesor, Will Schuester (Matthew Morrison). Para tener una antagonista por ahí dándole un poco de emoción al asunto, está la entrenadora de las animadoras, Sue Sylvester (Jane Lynch), que es prácticamente una psicópata e intenta acabar con el club de marras cada dos por tres.
De esta serie habréis oído hablar últimamente porque el actor que interpreta a uno de sus personajes principales, Finn Hudson (Cory Monteith), se ha pasado con las drogas y se lo han encontrado fiambre en una habitación de hotel en Canadá. Ha sido un drama porque el tipo tenía treinta y pocos años, y porque se iba a casar con otra coprotagonista de la serie (Lea Michelle, que interpreta a Rachel Berry), así que en general ha sido una historia bastante deprimente.
Por lo visto va a haber otras dos temporadas, pero yo os voy a hablar de las cuatro primeras, que son las que se pueden ver de momento.
La principal razón por la que creo que todo el mundo se mete con Glee es por lo cargantes que son sus personajes y porque destrozan vilmente clásicos en cada capítulo. A la gente no le gusta ver a un grupo de críos cansinos destruyendo temas de su grupo favorito. Además, a poco que veas la serie detectas un conjunto de incongruencias y absurdeces bastante molestas y difíciles de ignorar:
1. El Glee Club siempre está luchando por financiarse los viajes porque no tienen dinero para nada, pero luego tienen una banda entera, violinistas incluidos si hace falta, en todo momento a su alrededor. Tanto en clase como cuando a alguno le da por expresar sus sentimientos a través de una canción de manera aleatoria. ¿Quieres cantarle una canción a tu novia para decirle lo mucho que la quieres en medio de la clase de matemáticas? Allí se presentan un pianista, un batería, cuatro violonchelos y un tío con unas maracas. También aparecen, si se requiere, máquinas de viento, de humo, de luces, decorados enormes, y lo que haga falta en el momento. Lo único que explican más o menos es que tengan vestuario infinito concreto para cada ocasión, incluso aunque sea para una mini actuación de ensayo. Por lo que se ve en un capítulo, tienen explotado al club de costura (sí, tienen un club de costura en el instituto). El resto, misterios de la naturaleza.
2. ¿Tú tardas tres semanas en preparar una coreografía? Ellos hacen diecisiete en una semana. Además, nunca ensayan. Siempre sale todo bordado a la primera, e incluso cuando cantan temas para practicar acaban haciendo una actuación súper profesional.
3. Todos son chavales de entre 15 y 17 años, la mayor parte de ellos con familias paupérrimas que apenas llegan a fin de mes, pero oye, saben leer música, tocar la batería, la guitarra, ballet clásico y claqué. Y también componen canciones de un día para otro.
4. Están en TODOS los eventos existentes. Bodas, funerales, bailes de fin de curso, graduaciones. ¿Te casas? Cantan en la ceremonia. ¿Se te muere alguien? Cantan en la ceremonia. Y así.
5. No avisan de qué canción van a interpretar, pero los músicos la tocan bien igual. Y se suele acoplar algún compañero con una coreografía ejecutada a la perfección de manera espontánea.
6. Tienen 16 años, pero se saben todas las canciones. De todos los artistas. De todos los tiempos. Les da igual Madonna que Wham! que Rihanna, uno se pone a cantar y el resto hace unos coros maravillosos.
Dicho esto, recordemos que yo me he tragado cuatro temporadas enteras, y esto es porque Glee tiene un montón de puntos positivos que parece que la gente está empeñada en ignorar.
Para empezar, tiene un gran sentido del humor, ácido y salvaje como pocos. Chistes autocríticos los hay en casi todos los capítulos. De hecho, todas las cosas negativas que he enumerado antes ya las han dicho los propios personajes de la serie. Se meten con todo y con todos; hasta hay un personaje dedicado a ello, Sue Sylvester, que se dedica a insultar a los alumnos por ser gays, o negros, o hispanos o cualquier otra razón que se le ocurra. Al buen guión contribuyen los estupendos cameos que meten de vez en cuando; ha aparecido gente como Britney Spears, Neil Patrick Harris, Kate Hudson o Gwyneth Paltrow.
En cuanto a los personajes, pues bueno... Schuster es insoportable y muchos personajes si no estuvieran daría totalmente igual, pero algunos merecen la pena. A destacar, Santana Lopez, interpretada por Naya Rivera, y Principal Figgins (director Figgins, supongo que le llamarán en español), interpretado por Iqbal Theba. Ésos son una risa. Eso sí, en la cuarta temporada han entrado nuevos personajes, aún más repelentes que los originales.
Otro tema interesante es que se tratan a fondo todos los temas chungos que te atacan cuando eres adolescente, cosa que está muy bien, pero que deriva casi siempre en una inyección de lecciones morales así, de golpe. Es todo súper empalagoso siempre. Con que hay que ser tolerantes con los gays se ponen súper pesados, más que nada porque uno de los protagonistas es súper súper gay (Kurt Hummel, interpretado por Chris Colfer. Yo le odiaba al principio, pero en la cuarta temporada es un gran personaje, dadle una oportunidad).
Y lo que desde mi punto de vista hace que la serie merezca la pena, junto con el ya mencionado sentido del humor, es que ayuda a coger una gran cultura musical con respecto a los clásicos, y además te enteras de lo que está de moda. Descubres música nueva y te permite escuchar sin prejuicios canciones de artistas a los que en otra situación no les darías una oportunidad en la vida. Quiero decir que a lo mejor estás viendo un capítulo, cantan una canción, suena bien, y resulta que es de los Jonas Brothers. ¿Le habrías dado una oportunidad a esa canción si te hubieran dicho por la radio lo que vas a oír? No. O al menos mucha gente no. Y así a veces un grupo que no te gusta nada saca una canción que te encantaría si la escucharas, pero que no llegas a conocer nunca porque eres un pedante cansino y lleno de prejuicios. Bueno, o porque ya le has dado treinta oportunidades a ese grupo y siguen siendo malos. Pero nos entendemos. Y no os lo vais a creer, pero igual que destrozan canciones estupendas, también hacen versiones muy dignas de vez en cuando.
No sé si habrá Glee Clubs de éstos en España; me imagino que no, porque si existieran, los de la SGAE ya habrían salido en las noticias por ir por ahí haciendo piras funerarias con estudiantes de instituto. Además, a la tercera vez que alguien se pusiera a cantarle una canción de amor en medio del comedor a su novio, alguien le tiraría un servilletero a la cara.
Como conclusión, Glee es una serie cargante a más no poder, pero que tiene su encanto. Hay capítulos muy muy flojos, y capítulos estupendos, pero en general, si sabes lo que estás viendo y estás dispuesto a concederle muchas licencias, al final hasta engancha.
En cualquier caso, seguro que habéis visto series peores.
Hum... he intentado verla un par de veces y al final no me engancha. a mí las historias de buenos muy buenos y malos muy malos como que no me enganchan. Además de que los musicales en general no son mi fuerte (a excepción de Grease y Dirty Dancing).
ResponderEliminarMe temo que como de costumbre, me gusta más tú crítica que el original :)
Un besazo!
Han hecho un capítulo de Grease hace poco :D
EliminarA mí me costó darle una oportunidad, pero al final si que me ha terminado gustando bastante. Aún así, cierto es que tampoco me atrevo a recomendarla abiertamente, porque tiene algunas cosas difíciles de soportar.
Me alegro de que te guste la crítica, al menos :D
me has hecho venir ganas por igual de verla y de no verla; qué bipolaridad más tonta, oiga...
ResponderEliminar(y sí, de lo poco que sabía de la serie era la muerte reciente de uno de ellos en la vida real)
A mí me pasa un poco igual; tienen capítulos que son de tirarles cosas, pero luego otras partes molan. Es cuestión de que algún día que te aburras te veas un par de capítulos y descubras si soportas a lo críos cantores o no.
EliminarSinceramente, nunca le he dado ni media oportunidad a esta serie... Me parece súper traída de los pelos. Y seguramente lleves razón en que debe tener sus cosas buenas pero ya bastante pillada de tiempo voy para ver las series que sí me llaman la atención como para estar dando "oportunidades". Jajaja. Un besote y sigue haciendo críticas de series, que me ha molado...
ResponderEliminarEs que ésta estaba pidiendo a gritos una crítica, lo ponen tan fácil xD Si veo alguna otra digna de crítica, la haré ;)
EliminarMi hermana la ve, y por lo tanto yo tambien he visto bastantes capis, peeeeeero no me gusta y principalmente por los motivos que has dicho...
ResponderEliminarLa mayoría de canciones las estropean y además los personajes no me molan nada salvo la Santana y la rubia tonta, además que es escuchar cantar a la Rachel esa y me tengo que tapar los oidos, no soporto nada su manera de cantar!
Pero eso sí, descubres algunas canciones molonas, ahí descubrí la de somebody that i used to know que luego fue un exitazo ^^
Rachel mira que canta bien, pero no sé por qué es súper cansina, sí... pero bueno, si descubriste a Gotye y a Kimbra, eso lo compensa un poco :D
EliminarSólo por los puntos uno, dos y tres ya no quiero verla. Soy muy maniático. Mi hermana la veía y me ha hecho escuchar algunas versiones de canciones. Algunos arreglos están bien (no he escuchado que hicieran muchos clásicos), e incluso en ocasiones he visto que superan en cuanto a armonía y estética a la canción original. Pero ya soporté esos tres primeros puntos cuando mi hermana veía las series de Cris Morena: básicamente, niños pobres y huérfanos demostrando una habilidad musical, recursos económicos y facilidad para cantar y bailar en cualquier sitio que... bueno, te hace dudar de la parte de "pobres" y te hace pensar el porqué no están en una orquesta bien pagada. En esas series, alégrate, explicaban que podían cantar en cualquier sitio con ayuda de las hadas o la magia (o eso entendía yo).
ResponderEliminarPor como me lo describes parece una serie sentimentalista. Me mola poco el sentimentalismo. La moralina la tolero en una serie siempre que no te dén todo el rato la vara, pero el sentimentalismo no.
Paso de verla.
Hombre, es que si hay hadas, la cosa cambia.
EliminarYo no me atrevo a recomendarla alegremente. Tiene cosas demasiado cargantes. Y las lecciones morales abundan, así que nada, tú a lo tuyo, ya la veo yo por todos xD