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Mostrando entradas de agosto, 2010

Espadas, al amanecer, junto al aparcamiento

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Mi madre hoy se ha encontrado con esto en el coche: "Cuando aparques, respeta el espacio de seguridad y no choques contra el paragolpes del coche de delante. Te libras porque he revisado el coche y no tengo nada, pero la próxima vez, llamaré a la policía. P.D: Tengo fotos, si veo algo, te denunciaré." Mi madre dice que si tuviera el teléfono de la afectada (tiene que ser una chica, con esa letra y escribiendo en violeta) podría llamarla para decirle que no sabe ni de qué le está hablando, y está indignadísima porque dice que ella aparcó en condiciones y sin arrearle a nadie, pero la chica de la nota no parece estar de acuerdo... además parece que se ha ido cabreando más según iba escribiendo, porque lo que empieza como un consejo de la DGT acaba siendo una amenaza a lo "te voy a romper las piernas". Espero que no aparezca un sicario en la puerta de mi casa diciendo que tiene fotos de una rozadura y que viene a matarnos a todos. Cuánta agresividad.

Haz lo que quieras

Por no llamar a mis padres Madre y Padre, vamos a bautizarlos como Mafalda y Pascal. Ambientación: mi cumpleaños es mañana, pero hoy está mi tío en la ciudad, así que movemos la celebración. Pascal tiene que ir a comprar la tarta, y Mafalda le ha dicho que elija la que quiera. Pascal en la pastelería, hablando con la dependienta: Pascal - Es el cumpleaños de mi hija y me ha dicho mi mujer que compre la tarta helada que quiera. ¿De qué las tenéis? La dependienta suelta la colección disponible. Pascal - Ummm vale, de yogur y frambuesa está bien. La dependienta pone cara rara. Pascal - Esto... igual debería llamar a mi mujer a ver qué opina. La dependienta le anima enérgicamente a que llame. Mientras tanto en casa... ¡¡¡ RIIIIIIIIIIING RIIIIIIIIIIING RIIIIIIIIIIING !!! Mafalda - ¿Sí? ¿Qué? ¡No, eso no, coge una de nata con nueces! Clic. ¿Qué hemos aprendido hoy? Cuando alguien te dice "haz lo que quieras", "escoge lo que quieras" o cualquier otra frase que termine en &

Ploc ploc ploc

Tengo una mosquitera puesta en la ventana. Enorme, sellada, sólo le falta tener un par de seguratas con pistolas que dejen secos a los insectos que osen acercarse a mi cuarto. Me la he dejado abierta. Juro que era un resquicio infinitesimal, una rendija tan minúscula que para que la mosca que no me deja dormir desde hace una hora se haya enterado de que existe, tiene que haber alguien que esté informando desde dentro. Al tercer "ploc" que he oído (ese sonido tan desagradable que hacen los insectos cuando se chocan contra las paredes), me he resignado a aceptar que en mi habitación había un animal volador no identificado. Me levanto. Mírala, qué feliz, revoloteando por mi cuarto como si estuviera en su casa. Me dedico a perseguirla y a intentar que salga por la puerta, hasta que al final, lo que consigo es que el bichejo quede atrapado en una de las lámparas en forma de cuenco que hay en mi pared. Vaya por Dios. Bueno, ya saldrá. ... ... ... Pues parece que no sale. Ding-dong

Nolan y DiCaprio nos devuelven la fe en el cine

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No sé qué estabais haciendo antes de empezar a leer esto, ni me interesa. No es importante. Leer este post tampoco es importante. Dejad de hacerlo y marcháos al cine a ver Origen. Venga. ¡Venga! No voy a hablar del argumento de la película, ni voy a dar ningún dato concreto, porque cualquier información que se conozca antes de entrar en la sala es un estorbo que le roba encanto a esta maravilla que es Origen (Inception, Christopher Nolan, 2010); sólo puedo decir que la enrevesadísima historia central (hay que estar atento para enterarse de todo), que por sí sola ofrecería una película digna de una lluvia de premios, casi pasa desapercibida cuando se la compara con el mundo interior del personaje protagonista. En cuanto a los actores, Marion Cotillard está insuperable, Ellen Page cada vez actúa y elige mejor sus papeles, Leonardo DiCaprio... bueno, es Leonardo DiCaprio, él solo es una garantía de buena película así que no me sorprende que esté increíble, como siempre, y por último

Reconocimiento facial

A veces creo que si pasa más de un año sin que meta la pata y haga un ridículo espantoso, el universo se autodestruirá. Hace un rato, cuando estaba llegando a la urbanización en la que vivo los fines de semana, por una llamada telefónica de mi madre, que ya estaba en casa, me he enterado de que mi perra había desaparecido. Así que me he puesto a recorrer la urbanización arriba y abajo a ver si la encontraba, parando a preguntar a cada vecino que veía. Las primeras interrogadas han sido dos viejecitas sentadas en un banco: Yo - ¡Hola! Mi perra se ha perdido, ¿no la habrán visto, verdad? Viejecita1 - No hemos visto nada, hija... nos habríamos dado cuenta, un perro suelto por aquí sin dueño... Viejecita2 - Y llevamos aquí un buen rato. Yo - Bueno, no pasa nada, voy a ver si la encuentro, muchas gracias. Viejecita1 - ¡A ver si tienes suerte! Qué majas las señoras. He seguido recorriendo la zona, preguntando a más gente, hasta que me ha llamado por teléfono mi madre para decirme que ya habí

Noche y Día: parodiando a las pelis de acción

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¡Tengo que ir al cine más a menudo! Hasta que no estoy dentro de la sala no me acuerdo de cuánto me gusta... En este caso le ha tocado el turno a la comedia de acción Knight and Day (James Mangold, 2010), cuyo título ha sido innecesariamente traducido al español como Noche y Día , cargándose así un par de puntos interesantes de la película, que sólo podían entenderse si se sabe que knight significa caballero... pero ¿qué vamos a decir a estas alturas de los elementos que traducen los títulos de cine al español? Al menos yo ya estoy curada de espanto. El caso es que lo que parecía otra peli de acción barata (barata la acción, no el rodaje), terminó siendo una estupenda sorpresa de casi dos horas en las que tanto los dos chicos que vinieron conmigo como yo misma no paramos de reírnos. La historia está más que vista: Súper agente secreto (Roy Miller, interpretado por Tom Cruise) se cruza "por casualidad" con una chica que lleva una vida normal y corriente (Cameron Díaz en