He destruido la danza del vientre
¿La danza del vientre no era un baile súper sensual? Porque creo que lo he roto. He ido hoy a una clase de ésas, todo contoneos y pañuelos con moneditas atados a la cadera, y ha sido lamentable. Tristísimo. Yo, intentando imitar a la profesora, convirtiéndome en un híbrido entre Shakira cuando le da por ponerse a bailar como si estuviera loca y una mala actriz parodiando una peli de Bollywood. Y todo esto mientras rezaba para que Antón -mi compañero de clase, excompañero de trabajo y que resulta que va a mi gimnasio- no pasara por delante de la clase y me viera en pleno apogeo. Le imagino grabando un vídeo y me dan escalofríos. Lamentable, sí, no hay otra palabra. Tengo que buscarme otro deporte.